Escuela de pacientes
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Interacciones medicamentos y alimentos

A menudo, los farmacéuticos son consultados sobre la manera en que debe tomarse un medicamento en relación a las comidas: en ayunas, con alimentos, evitando algún medicamento en concreto, o con algún otro que pueda favorecer su absorción…

Interacciones medicamentos y alimentos

Aunque lo habitual es que los efectos de la interacción alimento-medicamento no tenga consecuencias fatales, constituyen un problema significativo por ser una causa frecuente de efectos adversos imprevisibles o de alteraciones en la respuesta farmacológica esperada. Las interacciones entre los fármacos y los alimentos (nutrición o nutrientes), en general, pueden agruparse en tres áreas fundamentales:

  • Interacciones alimento-medicamento (IAM): influencia de los alimentos sobre el efecto de los fármacos.
  • Interacciones medicamento-alimento (IMA): influencia de los fármacos sobre el aprovechamiento de los nutrientes.
  • Influencia del estado nutricional sobre el aprovechamiento de los fármacos.

En este tema nos centraremos en los primeros.

Cuando hablamos de una IAM, el responsable de la interacción es el alimento, que puede modular el efecto del fármaco. Las IAM pueden ser provocadas por alteraciones en los mecanismos de absorción, distribución, metabolismo o excreción de los fármacos que se estudiaron en temas anteriores. Sin embargo, la mayoría de problemas tienen lugar durante el proceso de la absorción. Su resultado podría ser un aumento o una disminución de la concentración del fármaco en sangre, o bien, un retraso en el tiempo que se tarda en alcanzar la concentración adecuada, y por tanto, en el tiempo en que el medicamento empieza a ser activo en el organismo. Estas situaciones pueden tener repercusiones clínicas importantes ya que podrían originar problemas de reacciones adversas cuando aumenta la concentración, o por el contrario, de no cubrir las necesidades del paciente cuando el resultado de la interacción es una disminución en la concentración o un retraso en el inicio de la actividad.

En general, la ingesta de alimentos aumenta el tiempo que pasa el medicamento en el estómago, retrasando su absorción en el intestino y, como consecuencia, se espera que tarde más en hacer efecto. Por otra parte, el consumo de alimentos estimula la secreción gástrica de ácido clorhídrico, bajando el pH, hecho que puede favorecer la degradación de algunos medicamentos sensibles al medio ácido. Sin embargo, las grasas, principalmente, producen un aumento de la secreción biliar, lo cual mejora la absorción de los fármacos poco solubles.

En cualquier caso, el efecto de la interacción podrá ser beneficioso o no. Por todo ello, ante la pregunta ¿debo tomarme los medicamentos con comida? no se puede establecer una norma que sirva para todos los fármacos, y deberemos considerar los medicamentos uno a uno para ver como tienen que tomarse en cada caso.

 

Interacciones más significativas

  • Acenocumarol (Sintrom®).

    Una dieta rica en vitamina K puede provocar una disminución en la eficacia del fármaco. Distintas verduras, como espinacas, coles de Bruselas o brócoli, contienen cantidades apreciables de vitamina K. Se aconseja avisar a su médico o farmacéutico en el caso de que la ingesta de estos alimentos sea significativa.

  • Alendronato.

    La absorción de este fármaco se ve disminuida en un 60% cuando se ingiere con café o zumo. No se absorbe en absoluto cuando se toma durante una comida. Por ello, ha de tomarse en ayunas (consideramos ayunas, una hora antes o dos horas después de una comida) y con un vaso grande de agua.

  • Ácido acetilsalicílico.

    Por su toxicidad gastrointestinal, es importante tomarlo después de las comidas. Además, los alimentos ricos en vitamina C mejoran la tolerancia gástrica del ácido acetilsalicílico.

  • Hierro.

    Es de destacar la capacidad que tiene la vitamina C de aumentar la absorción de estos preparados.

  • Antiinflamatorios no esteroides (AINE) como ibuprofeno o naproxeno.

    Los efectos adversos gastrointestinales pueden ocasionar problemas severos relacionado con la irritación de la mucosa. Por ello se aconseja administrar conjuntamente con alimentos.

  • Azitromicina.

    Los alimentos pueden disminuir la absorción de la azitromicina en casi un 50%, por ello se recomienda suministrar el fármaco en ayunas para una absorción óptima.

  • Benzodiazepinas (diazepam, lorazepam…).

    Los alimentos pueden retrasar la absorción. En caso de que se busque un efecto hipnótico, es recomendable, adelantar la cena para administrar el fármaco en ayunas, justo antes de ir a la cama.

  • Cefuroxima.

    Los alimentos favorecen la absorción de la cefuroxima.

  • Fenilpropanolamina (presente en algunos preparados antigripales).

    El efecto hipertensor de la fenilpropanolamina puede resultar potenciado por el efecto de la cafeína. A su vez, la fenilpropanolamina puede también aumentar significativamente las concentraciones plasmáticas de la cafeína.

  • Furosemida.

    Su absorción se ve disminuida con alimentos. Por ello está recomendada la toma en ayunas. Si habitualmente se toma con alimentos, es preferible no modificar la pauta de administración.

  • Paracetamol.

    Se puede tomar con o sin alimentos, aunque si se administra en ayunas ejerce su efecto de manera más rápida.

  • Penicilinas (como la amoxicilina).

    Los alimentos disminuyen su absorción por lo que se recomienda tomar en ayunas.

  • Quinolonas (ciprofloxacino, norfloxacino, levofloxacino, moxifloxacino).

    Interaccionan con los lácteos. Se recomienda no administrarlas con derivados lácteos ni ingerir lácteos hasta 2 horas después de la administración del medicamento.

  • Tetraciclinas.

    La administración conjunta de tetraciclinas con leche o derivados lácteos o ricos en calcio es una interacción ampliamente conocida, que reduce la absorción de medicamento. Por ello, es preferible la administración en ayunas.

  • Inhibidores de la monoaminooxidasa (IMAO) como la fenilalanina.

    Interaccionan con varios alimentos:

Alimentos a evitar en pacientes que toman IMAO
Alimentos ricos en aminas biógenas
Vino tinto
Bebidas alcohólicas
Quesos curados
Embutidos curados
Conservas de pescado: arenque, caballa y salmón ahumados, en escabeche, de sardinas y atún
Caviar
Embutidos
Aguacates y plátanos maduros
Chocolate y derivados
Hígado de ternera, buey y pollo, así como sus derivados (patés)
Carnes fermentadas
Chucrut
Habas
Condimentos, salsas

A continuación, se detallan fármacos que presentan interacciones con los alimentos:

tabla.1 y 2

¡OJO!

  • El alcohol interacciona con casi el 50% de los medicamentos. Incluidas muchas especialidades publicitarias que se pueden adquirir sin receta en las farmacias comunitarias como la mayoría de antigripales. Es importante evitar el alcohol mientras dure el tratamiento.
  • El tabaco puede disminuir la efectividad de algunos medicamentos.
  • La cafeína puede afectar al mecanismo de acción de algunos fármacos.
  • El zumo de pomelo interacciona con una gran cantidad de medicamentos. Algunos de estos fármacos son flavonoides, derivados cumarínicos, antagonistas del calcio como nifedipino o amlodipino, diltiazem, verapamilo, ciclosporina, tacrolimus, terfenadina, algunas benzodiacepinas, saquinavir, indinavir, cafeína, teofilina, atorvastatina o amiodarona, entre otros.
  • La fibra y las grasas también interfieren en la absorción de determinados medicamentos.
  • Requieren especial control pacientes en tratamiento con medicamentos cuya cantidad absorbida resulta crucial para su efecto, como los pacientes en tratamiento con antibióticos, anticoagulantes, antirretrovirales, antineoplásicos orales, nuevos fármacos para la hepatitis C… Por otro lado, podemos destacar fármacos que SE DEBEN ADMINISTRAR CON COMIDA:

tabla.3

 

¿Qué hemos aprendido?

  1. La mayoría de interacciones de los fármacos con los alimentos  tienen lugar durante el proceso de la absorción pudiendo dar lugar a un aumento o disminución de la concentración del fármaco, o bien, un retraso en el tiempo en que el medicamento empieza a ser activo en el organismo.
  2. Estas interacciones pueden tener consecuencias clínicas que pueden llegar a ser importantes, como son el aumento del efecto o de las reacciones adversas por un lado, o disminución o retraso del efecto del fármaco por otro.
  3. En general, es aconsejable tomar los medicamentos una hora antes o dos horas después de las comidas.
  4. Sin embargo, en algunos casos, es conveniente su administración simultánea, por lo que se recomienda siempre preguntar a su médico o farmacéutico.

Fecha de actualización: 23/05/2024
Coautores: PkGen