Enfermedad de Crohn
La enfermedad de Crohn es una enfermedad inflamatoria crónica del tracto gastrointestinal que puede afectar a cualquier tramo desde la boca hasta el año , siendo más frecuente su localización en la región íleo-cecal: íleon terminal (parte final del intestino delgado) y ciego (parte final del colon). Se caracteriza por presentar periodos de actividad ( brotes) seguidos de periodos asintomáticos ( remisión ), y por afectar a todas las capas de la pared intestinal, lo que puede producir un estrechamiento del intestino ( estenosis, oclusión ) , fístulas y abscesos.
Por tratarse de una enfermedad sistémica , también puede afectar a otras partes del cuerpo como piel, boca, articulaciones, etc. A este tipo de alteraciones (dermatológicas, oftalmológicas, reumatológicas, etc) se las conoce en conjunto como manifestaciones extraintestinales .
Aunque se pensaba que la enfermedad de Crohn se daba más en zonas urbanas, se está viendo un aumento de los diagnósticos en zonas más rurales.
La edad en la que puede presentarse es variable, siendo mayor la incidencia en los rangos de edad de los 15 a los 30 años y de los 50 a los 70 años , tanto en hombres como en mujeres.
¿Cuáles son las causas de su aparición?
Se cree que la enfermedad de Crohn se produce por un mal funcionamiento del sistema inmunológico en personas con predisposición genética tras determinadas exposiciones ambientales. La causa concreta de la respuesta inflamatoria inadecuada es desconocida, aunque las investigaciones apuntan a una compleja interacción entre la predisposición genética , los factores ambientales (dieta, deporte, tabaco, fármacos) y la microflora intestinal .
¿Qué síntomas son los más frecuentes?
- Diarrea
- Dolor abdominal
- Hemorragia rectal
- Fiebre
- Anemia
- Fatiga
- Pérdida de peso
- Síntomas perianales
- Síntomas o complicaciones en otros órganos del cuerpo. Entre las más comunes, están la presencia de lesiones dermatológicas, oculares, articulares y hepáticas.
Los tratamientos para la enfermedad de Crohn pueden estar dirigidos bien a controlar los síntomas y evitar la aparición de complicaciones durante los brotes o bien a mantener la enfermedad inactiva y evitar que sucedan nuevos brotes.
Entre las opciones terapéuticas encontramos:
- Tratamiento dietético
- Fármacos generales o sintomáticos: loperamida, antibióticos, suplementos de vitaminas y minerales, probióticos, plántago, colestiramina...
- Fármacos específicos: aminosalicilatos (sulfasalazina, mesalazina), corticoides, antimetabolitos, agentes biológicos e inhibidores de la Janus cinasa.
- En ocasiones cirugía
Consideraciones en población pediátrica y adolescente
Toda la información contenida en esta ficha es aplicable a la población pediátrica y adolescente, con algunas excepciones en los medicamentos a utilizar, por su escasa experiencia en niños. Su médico y farmacéutico velarán por el uso seguro de los medicamentos en su hijo.
Aunque se trata de una enfermedad más frecuente en adolescentes, también puede darse en niños más pequeños. Tienen mayor riesgo de padecerla los niños/adolescentes con antecedentes familiares, de raza blanca, que viven en países desarrollados y consumen tabaco.
A los sintomas recogidos en esta ficha, hay que añadirle el posible retraso en el crecimiento en el caso de los niños más pequeños.
Como se trata de una enfermedad crónica, no tiene curación, pero puede controlarse y conseguir períodos de tiempo prolongados sin síntomas, y es lo que llama "remisión". Es importante el cumplimiento correcto del tratamiento y los hábitos de vida saludables (alimentación adecuada), para prevenir las recurrencias y el regreso de los síntomas de la enfermedad.
Los niños pueden tener problemas físicos, emocionales, sociales y familiares a causa de la enfermedad. Es importante informar a su médico si esto ocurriera, ya que el estrés emocional puede reagudizar la enfermedad de Crohn y es posible buscar ayuda especializada tanto para los niños, como para los padres y cuidadores, si fuera necesaria.
Esta enfermedad es especialmente frustrante para los adolescentes porque las crisis pueden hacerlos más dependientes de sus padres en una etapa en la que ellos quieren su independencia.
Fecha de actualización:
08/05/2024
Autoría y revisión:
GTEII
Coautores:
GEFP